Primer desfile de la cuarta jornada de la pasarela madrileña. Daniel Rabaneda ha madrugado para presentarnos una colección urbana en la que rescata el delantal para reinventarlo y sacarlo a la calle convertido en prenda o parte de ella. Propuestas cargadas de estilo que, sin embargo, no pierden ese toque práctico de origen.
Materiales: A pesar de ser una colección dirigida a la próxima primavera-verano 2015, predomina el uso de la lana Merino, ya sea en versión pura o combinada. Por ejemplo, con cachemir, para dar forma a gasas ultraligeras que llenan de movimiento las prendas a cada paso; o con un acabado plástico para darle rigidez y un aspecto más tecnológico. Este contraste se observa, sobre todo, en las superposiciones de prendas o piezas que propone en cada uno de los looks de la colección.
Colores: La tendencia color-block hace acto de presencia con el gris como tono protagonista, combinado con blanco, negro, azul cielo, azul marino, ocre y toques de rojo, en forma de cordones en la cintura o cintas en los tirantes, entre otros usos.
Detalles: Las prendas también guardan sorpresas al darse la vuelta, con lazos o drapeados en la espalda; las cinturas se destacan con cordones fruncidos o la superposición de faldas sobre vestidos; los bajos de algunas prendas de gasa se vuelven asimétricos, llenando de vida las faldas, que prácticamente flotan sobre la pasarela; y los cut-outs (o recortes) no descubren piel, sino más tejidos siguiendo en la línea de la superposición, tan presente en toda la colección.
Complementos: Los zapatos son una colaboración del diseñador y Jeffrey Campbell. Se pueden ver botines en varios colores (negro, lila o gris) y llenos de detalles: con aberturas laterales y hebillas, cordones, tacón ancho y en versión peep-toe.
'Look' de belleza: Recogido o suelto, con ondas naturales ligeramente cepilladas para un efecto deshecho y raya lateral.
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