Fashion Week Madrid: Ana Locking
Simbología en un amplio abanico de 'prints'
Ana Locking, colección primavera-verano 2014.
Colección llena de símbolos y mensajes. Ana Locking se vuelve mística y nos cautiva con unas creaciones llenas de detalles y ‘cero minimalistas’. De hecho, la puesta en escena ya nos anunciaba cierto carácter filosófico: al final de la pasarela, una puerta triangular nos daba la visión de una columna de mármol sobre la que se asentaba una ‘pirámide de la providencia’.
DETALLES
Título: ‘What does God say’.
Inspiración: La película ‘Stalker’ de Andréi Tarkovski, que se inspira en la novela rusa ‘Roadside Picnic’, es el punto del que nacen estas propuestas para primavera-verano 2014. Tras esto, se busca conseguir el siguiente objetivo, en palabras de la diseñadora: “Quiero reflexionar sobre la necesidad de creer que tiene el hombre, y como la fe es la única que puede llevarle a la búsqueda de la felicidad. No sólo en su aspecto, religioso, sino en la confianza en uno mismo y en la fuerza interior para mantener un equilibrio entre materialismo y espiritualidad”. De ahí, una riqueza de creaciones llenas de simbología y fuerza visual.
Propuestas: Vestidos rectos con cortes asimétricos y superposiciones que crean volúmenes arquitectónicos; sudaderas estampadas, paneles de pedrería multicolor, ribetes y cremalleras en tono flúor; y muchos muy variados.
Simbología: De hecho, los estampados son hilo conductor de toda su colección. En ellos, se representa la palabra ‘One’, en referencia al dólar estadounidense como símbolo del aprecio actual por el dinero en detrimento de la fe que el hombre puede tener en sus propios recursos. Además, incorpora dibujos en referencia a la pirámide de la providencia, trampantojos de templos masónicos de Estados Unidos; y acabados inspirados en las vetas del alabastro.
Para ellos: Sobre todo, chaquetas. Es la pieza clave, aunque también sorprende con cortes de inspiración deportiva que se refleja en camisetas o ‘shorts’.
DETALLES
Título: ‘What does God say’.
Inspiración: La película ‘Stalker’ de Andréi Tarkovski, que se inspira en la novela rusa ‘Roadside Picnic’, es el punto del que nacen estas propuestas para primavera-verano 2014. Tras esto, se busca conseguir el siguiente objetivo, en palabras de la diseñadora: “Quiero reflexionar sobre la necesidad de creer que tiene el hombre, y como la fe es la única que puede llevarle a la búsqueda de la felicidad. No sólo en su aspecto, religioso, sino en la confianza en uno mismo y en la fuerza interior para mantener un equilibrio entre materialismo y espiritualidad”. De ahí, una riqueza de creaciones llenas de simbología y fuerza visual.
Propuestas: Vestidos rectos con cortes asimétricos y superposiciones que crean volúmenes arquitectónicos; sudaderas estampadas, paneles de pedrería multicolor, ribetes y cremalleras en tono flúor; y muchos muy variados.
Simbología: De hecho, los estampados son hilo conductor de toda su colección. En ellos, se representa la palabra ‘One’, en referencia al dólar estadounidense como símbolo del aprecio actual por el dinero en detrimento de la fe que el hombre puede tener en sus propios recursos. Además, incorpora dibujos en referencia a la pirámide de la providencia, trampantojos de templos masónicos de Estados Unidos; y acabados inspirados en las vetas del alabastro.
Para ellos: Sobre todo, chaquetas. Es la pieza clave, aunque también sorprende con cortes de inspiración deportiva que se refleja en camisetas o ‘shorts’.
