Cibeles Madrid Fashion Week: Adolfo Domínguez

Una violinista sobre la pasarela, música insinuante, desgarradora… Una puesta en escena que anunciaba un desfile muy visual, lleno de detalles y con un trabajo de patronaje muy estudiado. En este análisis de la forma, Adolfo Domínguez parte de un clasicismo con base ‘setentera’. Sin embargo, en una ascensión hacía el vanguardismo de nueva generación, el diseñador gallego transforma sus prendas con una deconstrucción que nos presenta nuevas siluetas, que encuentra su inspiración en la arquitectura de Gaudí.

DETALLES DE LA COLECCIÓN

• Tejidos: Sedas ‘shantung’, crepé, algodón, ‘voile’ de seda y linos pigmentados. Para la noche, 'paillettes' de colores.
• Colores: verde, blanco, negro y azul lavanda.
• Líneas: Las prendas se presentan con patronaje asimétrico, estratégicos rasgados, paneles que se superponen y transparencias geométricas. Cuerpos muy estructurados y faldas de corte trapecio.
• Un estampado: Manchas dispuestas al azar en negro y azul, sobre fondo blanco.
• Complementos: Bolsos de piel marrón y de inspiración ecuestre; zuecos con ‘patchwork’ de materiales y joyas inspiradas en especies en peligro de extinción, que nacen de un acuerdo de Adolfo Domínguez con ADENA.
• Para ellos: Los hombres que visten de Adolfo Domínguez apuestan por el color azul, en diversas tonalidades y combinado con blanco y gris. Ellos reviven ese dicho del diseñador de ‘la arruga es bella’ y también apuestan por los bolsillos de ‘plastrón’, las capuchas y, como calzado, espardeñas con cordones. En general, una moda desenfadada y ‘sport’, muy cómoda para el día a día.